Cuando estás a punto de morir, no se te pasa la vida por delante ni ves un túnel de luz, estas demasiado ocupado buscando la forma de sobrevivir, cuando está a punto de morir las cosas suceden en un orden claro y casi matemático. Primero te resistes y luchas con todas tus fuerzas, después el celebro toma el control y después nada, lo peor de la muerte se queda para los vivos, ellos son lo que repasaran tu vida, los que lloraran tu muerte en funerales. En mi caso es que lo triste es que nadie me recordara, nadie sabe cómo soy, nadie sabe lo que me gusta y nadie sabe cómo me llamo de verdad voy a morir todo van a llorar a otra persona y mi latida llevara otro nombre.

martes, 18 de diciembre de 2012

Carta de un culpable


Aquel día  si tan solo algo hubiera sido distinto, si el sol no hubiera brillado tan intensamente esa mañana de verano invitándonos a disfrutar de tan bello día  si no hubiera apagado el despertador 3 veces antes de por fin despertarnos a prisas porque nos esperaban en el café  de no haberte amado tanto como para rogarte esa noche te quedaras conmigo, quizá nada de esto hubiera pasado… quizá.

Hace 6 meses que no abres tus hermosos ojos pardos de los que me enamore, hace 6 meses que no te veo sonreír  mi estomago se retuerce, mi mente se dispersa y yo solo quiero volver a escucharte, pero no puedo, desde este rincón de la habitación te escribo estas ultimas lineas por si algún día vuelves a despertar, para que sepas que estuve aquí todo lo que mi conciencia me permitió  te hable cada día y te cante cada noche para que pudieras descansar, tome tu mano y peine tu cabello, pero nada a dado resultado, los doctores dicen que comience a perder la esperanza de recuperarte pero ¿Como podría perderla?.

Lo único que tiene este culpable es la esperanza de volver a verte correr hacía el mar, como lo haríamos aquella vez luego de desayunar, iríamos junto con nuestros amigos a disfrutar del calor, del sol, pero mis ganas de llegar, de no hacer esperar, apretaron el acelerador de la motocicleta y lo peor pasó, aun tengo el recuerdo de tu cuerpo rodando por la calle, luego te pierdo de vista, mi propio cuerpo sufre, pero eres tu quien se a llevado la peor parte; oh amor mio, te he robado la vida en esa carrera loca por el tiempo, por nada importante, te he quitado todo y ellos también lo saben, sus miradas se me clavan penetrantes como queriendo destrozarme, yo te aleje de ellos y te aleje de mi ¿Como perdonarme?

No quieren que tenga esperanzas de volver a verte entre nosotros, nadie me perdona lo que he hecho,ni yo mismo, pues entonces que en nuestros sueños nos encontremos preciosa mía  si yo te he robado la vida, robare también la mía para que nos encontremos en nuestro mar, bajo un sol distinto, para besarte los labios y oír tu voz al decir te amo, dejare todo por este último sueño, de volver a tenerte entre mis brazos.

0 comentarios:

Publicar un comentario